El hecho ocurrió días atrás en el estacionamiento del náutico. Un hombre sustrajo de un vehículo dinero y elementos de audio y el propietario realizó la denuncia en la comisaría primera. Como el hurto fue registrado por las cuatro cámaras que hay en el lugar, la víctima aportó pruebas que permitieron que días después que la persona fuera identificada y llevada a declarar a la comisaría.
No obstante, fue dejado libre en pocas horas a pesar de que según trascendió, pesaban sobre él varias denuncias, entre ellas la sustracción de 2000 dólares de un domicilio.
La situación generó gran malestar entre amigos y conocidos de la víctima, quien con gran sacrificio había logrado comprar elementos de audio para trabajar y fue despojado de sus bienes. “Él se quedó sin sus bienes y el ladrón sigue suelto por la ciudad, robando a otras personas”, se quejaron.